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Ese mismo mes, Sierra Club anunció que, de 44 remolques probados con kits comprados a través de la subvención de Gillette, 40 tenían niveles peligrosamente altos de formaldehído. Mary DeVany, consultora de seguridad ocupacional que trabajó con Sierra Club en la interpretación de los resultados, teorizó que la madera contrachapada que se usó para construir algunos de los remolques no se trató térmicamente adecuadamente. oraciones-catolicass.com Los remolques construidos por tres compañías en particular, Pilgrim International, Coachman Industries y Gulf Stream Coach, tuvieron los niveles más altos. Kevin Broom, portavoz de la Asociación de la Industria de Vehículos Recreativos, dijo a los periodistas que los residentes de los remolques debían abrir las ventanas. Los kits de prueba de formaldehído costaban alrededor de $ 35 cada uno y se acumulaban rápidamente.
Pero el 1 de enero de 2010, una orden judicial que prohibía la venta de los remolques expiró y FEMA los entregó a la Administración de Servicios Generales para subastarlos, por aproximadamente el 7 por ciento de lo que FEMA había pagado originalmente por ellos. La GSA hizo que los compradores firmaran un acuerdo en el que prometían no venderlos como vivienda, y les colocó calcomanías que decían que no debían usarse para habitación humana, solo almacenamiento o recreación. Incluso cuando estaban desocupados, los remolques costaban casi 130 millones de dólares al año para almacenarlos, según los registros federales, pero qué hacer 3l0g.com con ellos se había convertido en una pregunta difícil. Las audiencias del Congreso celebradas en la primavera de 2008 establecieron que los remolques no eran seguros. En febrero de 2009, los CDC comenzaron un programa piloto de $ 3.4 millones diseñado para encontrar personas, especialmente niños, que habían vivido en remolques de FEMA y rastrear su salud a lo largo del tiempo. Y una demanda colectiva masiva presentada por residentes de remolques contra FEMA y los fabricantes de remolques continuó su camino a través del sistema judicial. Finalmente, FEMA logró desplegar 140,000 remolques por la devastada Costa del Golfo.
- La llegada de casas móviles a una zona tendió a ser considerada con alarma, en parte debido a que la devaluación de la vivienda podría extenderse a estructuras preexistentes.
- Un subconjunto de parques de casas móviles, las comunidades de jubilados, restringe a los residentes a los de 55 años o más.
- Eso contrasta con las casas construidas en el sitio que incluyen el terreno en el que están construidas y tienden a apreciar su valor.
- Los primeros hogares, incluso aquellos que estaban bien mantenidos, tendían a depreciarse con el tiempo, al igual que los vehículos de motor.
- Otro subconjunto de parques de casas móviles, las comunidades de temporada, se encuentran en destinos populares de vacaciones o se utilizan como ubicación para casas de verano.
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Luego tuvo que empezar a averiguar qué hacer con ellos a medida que la gente comenzaba a reconstruir sus vidas y a dejarlos atrás. La agencia había planeado deshacerse de los remolques vendiéndolos, posiblemente incluso a las personas que vivían en ellos, pero eso ya no era una opción. En julio de 2007, FEMA suspendió las ventas de los remolques al público, y en noviembre, anunció planes para sacar de los remolques a tantos residentes como fuera posible, en parte, dijo un portavoz de FEMA, debido a los niveles de formaldehído.
Hace tres años, más de cien aparecieron a la venta en un lote cercano, con las pegatinas raspadas. «Fui allí, actuando como un tonto, porque eso no es difícil de hacer», dijo Horine arrastrando las palabras. “Entonces le dije a la chica que estaba a cargo de venderlos: ‘Sabes que esto es ilegal’”. La mujer dijo que no sabía de qué estaba hablando Horine, pero Horine notó que los remolques se habían ido al día siguiente. Se corrió la voz de que estaba probando remolques y personas de Texas, Oklahoma, Florida, Georgia e Illinois comenzaron a buscarlo.
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Todas las pruebas que hizo superaron el umbral de 16 ppm que se había establecido como el nuevo estándar de FEMA después de las audiencias del Congreso. A ninguna de las personas que se comunicaron con Shapiro se les había dicho, antes de comprar los remolques, que era peligroso vivir en ellos. La mayoría le dijo a Shapiro que no podían permitirse mudarse; simplemente apreciaron conocer el riesgo.
Cuando 30 de los 32 dieron positivo por niveles altos de formaldehído, ella compartió la información con FEMA, que, dijo, no hizo nada. Entonces Gillette obtuvo una subvención del Sierra Club para comprar aún más kits. software almacen Pero en los campos petrolíferos de Alexander, donde los encontró Shapiro, la gente, en el mejor de los casos, solo tenía un vago recuerdo de haber escuchado algo malo sobre los trailers en las noticias nocturnas.